Para hablar de los retos que tienen los masones en este siglo debe de abordarse este tema desde dos perspectivas, la interna, es decir los retos para con su propia institución y la externa, que son los retos para con la sociedad, sin embargo ambas guardan una relación tan estrecha que los retos de una necesariamente tienen una implicación en la otra.
La docencia masónica como clave de un cambio generacional
Tenemos que pensar en una nueva generación de masones, los masones del siglo XXI, los masones que dentro de 10 años no estén preguntándose hacia dónde ir, masones que tenga claro lo que son, el rumbo de la institución y sobre todo cual es su rol en la sociedad, los masones del Bicentenario, que mas que un término romántico es una forma de identificar el momento histórico en el que se debe de tomar una decisión de gran trascendencia para la orden en esta jurisdicción nacional.
Cuando hablamos de un cambio generacional no estoy proponiendo un cambio en las estructuras de la institución ni en la doctrina, si no en la actitud de sus miembros y su compromiso con la sociedad y gran parte de eso está en la instrucción, por lo tanto, aquí es donde toma singular importancia la docencia masónica, ya que para lograr un cambio de este tipo es necesario que haya formadores, es decir, no se trata de dar una lista de textos para que cada quien lea, si bien es cierto que la base metodológica de la instrucción masónica fundamentalmente ha sido por muchos años, el ser autodidacta fomentándose que el lector/estudiante lea e intérprete, es importante la guía del maestro masón para no dejar esa interpretación a una libre conveniencia y más aun, fomentar las acciones que permitan de una forma más pragmática observar lo que de esos análisis se deriven, pero también es imperativo que ese guía este formado para trasmitir conocimientos, es decir un programa de formación de formadores y sobre todo se tenga una selección de contenidos validados, ya que actualmente existe mucha bibliografía pero que algunos distan de ser textos que pudieran contribuir a delinear el perfil del masón del siglo XXI. Esto es un tema que otras grandes logias se ha abordado con la seriedad que implica, el caso que conozco de la Gran Logia de Chile en el año 2005 estando de visita ahí me pareció sumamente interesante, en México algunas Grandes Logias de igual forma lo han adoptado pero es necesario que todas le den el peso especifico que merece.
Regulares vs Adogmaticos
Otro reto que tienen los masones de hoy es el tema de la regularidad, en la actualidad son tantos los conflictos internos entre hermanos, entre logias o entre grandes logias que la consecuencia ha sido la formación de cuerpos para continuar trabajando al margen de la regularidad, las causas son muchas y en todas partes del mundo, aunque la mayoría de los casos son por motivos de impugnación de las elecciones de sus propias autoridades, estos conflictos ha generado desprendimientos que han encontrado cobijo en lo que ahora se autodefinen como masonería liberal o adogmatica, la cual a partir de un principio ecléctico ha llegando a un nuevo nivel de sincretismo en el que algunos de sus miembros, incluso, ya no se sienten a gusto y eso se debe fundamentalmente porque saben que no es del todo correcto en donde están, pero tampoco ven opción para retornar a la regularidad y volvemos a lo que plateaba al principio de este tema, lo que falta es actitud tanto en unos como en otros, en unos para reconocer errores y en otros para abrir espacio a la reconciliación y conste que no digo quienes son los unos y los otros.
Tratar de solucionar este tema en este momento es sumamente complicado y no se pretende en este ponencia dar una solución que no sea abrir camino al dialogo entre las partes y se tenga en ambas la actitud de buscar un justo medio que satisfaga a todos, esto, que es un principio básico de negociación, hasta en la masonería es complicado cuando los protagonistas de los conflictos están radicalmente confrontados, sobre todo cuando entre las partes, y me cuento entre ellos, están quienes pensamos que la regularidad no debe de negociarse, sin embargo hay que ponderar los intereses superiores de la orden y valorar cuando es necesario la excepción siempre y cuando la consecuencia de ello sea el fortalecimiento de la institución y evitar en lo futuro que tengamos una masonería mucho más que dividida, una corriente que defienda su postura de regularidad y la otra de adogmatica, tan enfrentadas que lo único que lograremos es el debilitamiento de la orden ante sus enemigos naturales. Quienes tiene su afiliación en la corriente adogmatica, que no serán pocos (gracias a nosotros mismos) empiezan a formalizar su presencia con organizaciones similares a las existentes en la corriente regular, algo está pasando en los grandes orientes, tenemos que ser más cautos, más prudentes, más inteligentes y más tolerantes sin que eso signifique complacencia, tenemos que identificar el verdadero fondo de nuestros problemas e identificar a quienes nos han infiltrado, hay que establecer puentes de comunicación que nos permitan buscar la reconciliación y erradicar los egos que nos impiden a que lleguemos al punto de estar todos en torno a una misma ara, esto, no es solamente una responsabilidad de los Muy Respetables Grandes Maestros, lo es también de quienes somos miembros de las grandes Asambleas que dictan el actuar de ellos y por supuesto lo es de quienes tienen como misión y principal responsabilidad la conservación del rito en su forma más pura. Tenemos que buscar la forma de arreglar nuestros problemas, vale la pena que hagamos el esfuerzo de una y otra parte para tomar lo mejor de ambos, sentar precedentes y acuerdos históricos que permitan a cada gran potencia en el marco de su soberanía establecer los mejores acuerdos para un fortalecimiento jurisdiccional.
Hoy, solo puedo dirigirme a una corriente en este foro, pero a quienes están en el otro lado también desde aquí van dirigidas las mismas palabras sin mayor pretensión que mover conciencias, yo se que en algunos casos se han hecho intentos, cuando ha pasado ya un tiempo prudente y al amparo de la reflexión ¿Acaso no se podrán acercar de nuevo las partes? Es una pregunta que solo los implicados pueden responder, pero para quienes están en esta circunstancia, este es el reto que su momento histórico les está dictando.
Los masones en la sociedad
Estas problemáticas abordadas anteriormente que son de carácter interno tienen una implicación en lo que muchos miembros de la institución señalan y otros incluso reclaman, la poca u nula injerencia que existe en la sociedad y el gobierno entendiendo, por esto la poca participación de la institución en los temas de interés nacional que están asociados al perfil de la propia institución. Esto varia de país a país, hay lugares en donde las grandes logias asumen un rol protagónico en la participación directa en los debates nacionales y otros países en donde esto se da a través de organismos subvencionados o asociados, el caso de México, se ha visto a lo largo de su historia que ha sido más la participación de los miembros de la orden quien de forma individual o colectiva pero con figuras sociales distintas las de la masonería formal es como se ha dado esta participación, a final de cuentas el objetivo es el mismo, de hecho en mi opinión el más correcto, pues a final de cuentas uno de los objetivos de la institución, como mencione al principio de este trabajo, es preparar ciudadanos que sean agentes de cambio para encontrar mejores estadios de desarrollo para la sociedad, enarbolando para ello los principios ideológicos de la masonería expresados en cada uno de sus grados, la preparación espiritual y moral del masón debe complementarse con su actuar cívico, con ello haremos que la orden ejerza su discreta actuación en la sociedad.
No nos escandalicemos porque algunos hermanos tienen participación política, escandilicémonos porque se van perdiendo libertades y ningún masón alza la voz para defenderlas.
Escandilicémonos porque la derecha sigue gobernando este país sin resultados que justifique el cambio de régimen y no actuamos los masones de forma organizada para evitarlo.
Hay otras muchas cosas mas de que escandalizarse que de la participación que tengan los masones en la vida pública, esto no solo es válido, hasta habrá que promoverlo siempre y cuando sea una participación que defienda o fortalezca la postura liberal, por ello es que es importante fomentar este tipo de participación individual o en colectivo procurando mantener siempre a buen resguardo a la institución que a final de cuentas es la cantera de donde habrán de surgir quienes con sus acciones le den ese status a la institución ante la sociedad.
Me parece que quienes reclaman no ser reconocidos por la sociedad es porque no han hecho ningún aporte en el desarrollo de esta, ¿ese es el comportamiento de un masón? ¿Acaso con recitar conceptos filosóficos, decorarse con los mandiles más caros, llenarse de medallas e ir a saludar cada semana a la logia es suficiente para llamarse masón? No, hermanos míos, ninguna de estas cosas son importantes, pareciera que hemos olvidado que lo verdaderamente esencial para un masón es empeñarse en ser mejor cada día y ser un constructor en el desarrollo de su propia sociedad.
¿Cuál es entonces el reto que debemos asumir?.
¿La defensa…
…del estado laico?
…de los recursos naturales?
…de la libertad de expresión?
…de la consolidación de la democracia?
…de los discapacitados?
…de la justicia social?
…de mayor autonomía para los municipios?
En fin, podría citar diversas temáticas y en cada una de ellas seguramente encontraríamos la oportunidad de hacer y proponer cosas, porque nuestro país es muy grande y diverso como diversos también son sus problemas y distintas cada una de sus regiones, ahí es donde cada uno de nosotros en lo individual o colectivamente es donde podemos hacer algo por nuestra comunidad y por nuestros hijos.
Qq\Hh\ ya es de todos conocidos los retos que asumieron los masones del siglo XIX y del siglo XX, lo que se diga en el siglo XXII de los masones del siglo XXI es responsabilidad nuestra, de nadie más.
En fin hay muchos temas más que dejar en la mesa en un todo fragmentado, hay pues la oportunidad de que cada uno de nosotros tome una de esas partes como reto, porque cada uno de dichos fragmentos en unidad nos otorgara claridad de una perspectiva innovadora del pensamiento de los masones actuales.
Dos recomendaciones al congreso masónico nacional
Hoy, estamos sometiendo a debate los grandes temas de la masonería simbólica contemporánea en México, esta es la más alta tribuna para exponer planteamientos y llegar a conclusiones, podría mencionar cualquiera de las metodologías de planeación existentes como instrumentos auxiliares en este congreso, sin embrago lo diré en términos muy simples, cualquiera que sean las conclusiones a las que se llegue en este tema y otros, me parece que deben de tener seguimiento, este es otro de los retos que este congreso nos impone, por ello, dos sencillas recomendaciones, la primera, deberá contarse con un plan de implementación y la segunda, un equipo de Hh\ que de seguimiento a las conclusiones que nos lleven a resolver los grandes retos que nos plantearemos.
Es cuanto
M.'.M.'. Armando Álvarez González
R.'.L.'.S.'. Dr. Belisario Domínguez No.13 Or.'. Chetumal, Quintana Roo
M.'.R.'.G.'.L.'. de Estado Andrés Quintana Roo
Gr.'.Or.'. de Chetumal Q. Roo a 15 de Julio del 2010 E.'.V.'.
---------------------Fuente: Diario Masónico.